13.5.14

Desastres a domicilio Parte I

Yo también hubiera dibujado sòlo estrellas en la postal. Porque no soy feliz. Tus ojos son como estrellas, polvo de estrellas. Tu ausencia es una casualidad absurda. Los momentos que no te pienso eres un punto divagando en la galaxia. Ya no puedo escribir. Estoy seco. Quizàs nunca debí hacerlo. Acciones, omisiones. Da lo mismo. Soy un hombre terrible, también te mataría con una almohada si tuviera que escuchar què te duele todo el tiempo. Dame un beso y dime que vas a salvarme, que vas a venir a salvarme y que vas a pintar el mundo naranja como cuando flotabas por la casa y yo sonreía como un bobo. Dime, dime que vas a salir de la tumba y arrancarme el nudito que traigo en la garganta. A veces no puedo, y esas veces últimamente son siempre. Sin ti yo no puedo. Eres un muerto terrible, eras un vivo peor. Dime que vas a llevarme, cargarme, arrastrarme. Una, dos, tres estrellas para ti y un beso, un beso enorme.

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