¿Te acuerdas cuando brillabas? Y que llenabas la habitación de luz, y la cama la inundabas de amor. Y el cuerpo entero me lo tapizabas de razones para vivir, para ser feliz, para nunca dejarte. Y te aferrabas a mi espalda y a veces me llorabas al oído lo mucho que me amabas. Y la casa entera olía a café y pan con mantequilla, a palomitas con película. Y al búnker entero lo llamábamos hogar, mientras tus pies jugaban con los míos, por debajo de las cobijas. De todo eso, ¿te acuerdas? Cuando me ponías de todos colores mientras tu lengua viajaba a toda velocidad por todos los caminos de mi existencia. Cuando tus ojos brillaban más que una canica y yo me retorcía de felicidad de verlos. Cuando eramos turistas de nuestro propio mundo y cuando te hacía el amor sin dormir, sin descansar. De cuando eras mi cómplice y no mi enemiga. De cuando se me hinchaban los ojos de leerte y se me revoloteaban las tripas. De cuando me prometías que éste barco nunca se iba a hundir y yo te creía. De cuando me repetías muy quedito que yo era tu universo entero y se me inflaba el corazón y se ponía rojo, muy rojo. De cuando me tenías dentro y sentías que podías enfrentar al mundo. De cuando nada se había derrumbado. De cuando nada colapsado. De cuando nada afectado, cercenado, degollado, mutilado, infectado,desgarrado. De cuando nadie era culpable, de cuando todo lo bueno se multiplicaba ante nuestros ojos, de cuando toda la mierda se dividía. De cuando el nosotros, era la única bandera que teníamos. De cuando el desastre era no besarnos antes de dormir. De cuando lo único que dolía era que no había más tiempo. De cuando verte entrar era magia, de cuando verte partir era un hoyo negro. De cuando todos los días merecían ser contados. De cuando no estábamos,cariño, todos rotos.
S.T/B.C