28.3.20

132 km

Tratando irremediablemente de mostrarte: cómo te ven mis ojos, 
cómo te sienten mis manos. 
La fuerza con que late cada espacio 
dentro de mí, 
ahora que habitas en mi mundo.
El detener del tiempo, 
las horas muertas en que no te veo. 
Las horas como fénix si te pienso. 
El abrumarme con los 
"contigo todo, contigo siempre". 
Y sostener la respiración por segundos, 
y estrenar la sonrisa 
y estallar dentro tuyo. 
Y nombrarte mi dueña, 
y dar un pasito a ver cómo pinta el futuro
y que lleve tu nombre.  

S.T.

25.3.20

T.

(Nunca te he pedido nada)
Salvo quererme y que lo llames 
de otra forma, para no salir corriendo. 
O pedirte que me alcances si llego a hacerlo. 
Que nunca me digas que no, 
que seas mi <sí> eterno,
mi <sí,un ratito, mientras te quiero.>
Nunca, nunca te he pedido nada: 
ser dueña de tus suspiros, 
tus sonrisas.
Y también de tus silencios.》
S.T.

22.3.20

Quack.

Mis libros y mis huevos y mi boca y mis manos a tu nombre. Mis dolores, mi cansancio y mis ojeras a tu nombre. 
Y una que otra nube a tu nombre. 
Te estoy viendo dormir, te estoy viendo, te estoy viendo. Me estoy viendo a tu lado, tragándome todo lo que sale de ti, empezando por tus tristezas, pasando por tu coño. Me estoy volviendo loco, me estoy volviendo tuyo y cada vez menos mío. 
Me estoy volviendo humano, me estoy cayendo a pedazos. Me estoy enamorando de tus tropiezos, de tus defectos, de tus inevitables, de tus constantes. 
Del laberinto y el nudo que somos. 
S.T.

20.3.20

El árbol de naranjas.

¿Recuerdas, mi amor, aquélla vez 
que estabas en el hospital 
con tu cara pálida y tus manos temblorosas? 
Sentado, como un niño indefenso, escuchando atentamente : 
"Señor Trento, usted no podrá tener hijos, hay un proble..."
Y todo se volvió un eco, 
y tu casa de cristal se cayó al suelo, 
hecha añicos. 
Mi hombre de las cavernas 
¿Recuerdas lo enojado que estabas? 
¿Y recuerdas que yo aún no llegaba a tu vida?
A decirte: Yo soy tu tierra y tu cansancio
y tu espejo y tu jodido universo 
y no necesitas nada más. 
Nunca más. ¿Recuerdas?


S.T.

19.3.20

Aterrizaje.

¿Te puedo conservar en el frasco más pequeño que encontremos? 
Y entrar y hacerme bolita contigo, 
y no tenerle miedo a las estadísticas, 
y no tenerle miedo al golpe 
que siento en el estómago 
cuando no te veo.
Y guardar el costal 
de miradas, de sonrisas
y el costal de ganas, 
en el frasco más grande.
Junto con las ansías,
junto con besarte
colapsarme y engancharme. 
Junto con tus ojos. 

S.T.

14.3.20

Pozos.

No ha sido tan mala esta vida, cariño, ¿cierto?
¿No te he dado cada gramo de mi alma y de mis huevos y de mis miedos?
¿No es suficiente entonces quemarse vivo?
No ha sido tan mala esta herida, cariño,¿cierto?


S.T.

8.3.20

De putas, primavera.

No te pasan, escaleras, no te pasan. No te olvidan anillo en boca, no te olvidan. No te extrañan, vías del tren, no te extrañan. Hoy que te miento, hoy que te pienso, hoy que como cada año, te entierro. No te muerden los labios, pedacito, no te muerden. No te cargan el abrigo, cariñito, no te cargan. Hoy que grito, sudo y me doy de topes. Café y tu vestido, siempre atento, siempre tuyo, siempre olvido. No te quedas, con el gato, no te quedas. No te marchas ni te vuelas, ni me lloras, no se extraña cuando huele a tierra fresca. No te duele cuando callas, viejita muerta.

S.T.

4.3.20

Un cachorro

Que seas el esposo que nunca fuiste, 
el padre que siempre debiste.
Que seas un futuro de esos bien bonitos que quieres que lleguen 
ya ya ya ya porque no hay tiempo que perder. 
Que seas, 
mi niño, mi rayito de luna. 
¿Ves que tiembla la voz cuando lo pido?

S.T.