Papá utilizaba un día completo para poner la decoración navideña. Cuando terminaba solía sentarse por horas frente al arbolito.
Sin decir una palabra.
Y yo lo observaba a él,
tratando de entender qué pensaba.
Hasta ahora lo entendí.
<< No, no te quiero. Sólo que cuando no le veo sentido a nada, eres la mejor manera que conozco de destruirme. >>