Mis libros y mis huevos y mi boca y mis manos a tu nombre. Mis dolores, mi cansancio y mis ojeras a tu nombre.
Y una que otra nube a tu nombre.
Te estoy viendo dormir, te estoy viendo, te estoy viendo. Me estoy viendo a tu lado, tragándome todo lo que sale de ti, empezando por tus tristezas, pasando por tu coño. Me estoy volviendo loco, me estoy volviendo tuyo y cada vez menos mío.
Me estoy volviendo humano, me estoy cayendo a pedazos. Me estoy enamorando de tus tropiezos, de tus defectos, de tus inevitables, de tus constantes.
Del laberinto y el nudo que somos.
S.T.
Como diriamos por aqui:
ResponderEliminarHasta las trancas.
Besos.
Imposible negarlo.
EliminarBeso de vuelta.